Se puede comer cocido y aderezado de distintas formas, como parte de guisos, postres o platillos; también asado o convertido en masa, tortillas, tostadas o totopos. ¡Hasta existen bebidas hechas a base de maíz! Se trata de un alimento tan ancestral como versátil y actual. Todas las personas, al menos en México, lo consumimos como parte de nuestra dieta diaria, pero ¿qué tanto sabemos en realidad sobre el maíz? En este artículo te contaremos un poco sobre su historia y los múltiples beneficios que este aporta al organismo.
El cultivo de maíz data de hace más de 7,000 años y es originario de México. Por ejemplo, se sabe que fue una de las principales fuentes de alimentación para la cultura azteca, quienes plasmaron la importancia de este en grabados, pinturas y esculturas que aún se conservan. Fue una de las primeras especies que fueron llevadas a Europa que tardaron en incorporarlo a su alimentación base; al inicio, se usó para alimentar a los pues no era un alimento muy bien visto por no provenir de Europa. Fue hasta bien entrado el siglo XIX que se convirtió en un alimento importante para la dieta de esta región.
El nombre científico del maíz es Zea mays y, dependiendo de la región, país o cultura, se le nombra de distintas formas: anza, millo, mijo, oroña, o panizo en español europeo, y en español americano choclo, elote, jojoto, sara o zara. Su nombre común “maíz” parece estar derivado de la palabra taína “mahís” con que los indígenas del Caribe la denominaban. Por otro lado, la palabra “elote”, que se usa para llamar a las mazorcas, proviene del náhuatl elotl, mientras que a las mazorcas sin grano se les llama olote.
Este alimento, se le nombre como se le nombre, el maíz es un alimento muy completo que contiene principalmente vitaminas A, B y E, así como un sinnúmero de minerales, que favorecen el correcto funcionamiento del cuerpo. En cuanto a las vitaminas, el elote es rico sobre todo en vitamina A, que resulta esencial para la lozanía de la piel y la salud visual. Durante el embarazo es muy recomendable consumir elote, pues ayuda al crecimiento integral del feto.
Los antioxidantes que contiene este alimento previenen la formación de radicales libres, que ayudan a prevenir enfermedades cancerígenas. De hecho, algunos de sus compuestos fundamentales han sido usados con éxito para combatir tumores de cáncer de mama y de la próstata. Un dato muy interesante es que el elote cocido tiene más propiedades antioxidantes que estando crudo.
En cuanto a su contenido de minerales, el maíz es rico en cobre, hierro, magnesio, zinc y fósforo. El hierro previene la aparición de la anemia; mientras que el magnesio es fabuloso para el mantenimiento de la salud cardiaca; y el fósforo, por su parte, colabora en el crecimiento del tejido óseo.
¿Sabías que una taza de maíz representa el 9 % de la cantidad de proteínas recomendada diariamente? Sin embargo, lo ideal es combinarlo con otros alimentos, como frijoles, para consumir la cantidad y variedad de aminoácidos necesarias para el buen funcionamiento del organismo.
Además de todos los beneficios ya mencionados, el maíz es alto en fibra, por lo que ayuda a regular la digestión y estabilizar los niveles de colesterol y glucosa en el cuerpo, lo que disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
Ahora ya conoces un poco más sobre la historia de este rico alimento y algunos de sus múltiples beneficios. Cuéntanos cómo le llaman al maíz en tu región y de qué maneras te gusta prepararlo y comerlo.
Leave a Reply